Mantenimiento de Sistemas de Alarmas
clave para la protección confiable
Cuando el sistema de alarma está bien instalado y es de buena calidad, no necesita gran atención técnica. Aún así, y al menos una vez al año, es bueno realizarle el mantenimiento preventivo a todo el sistema, para garantizar que funcione correctamente y proporcione una protección efectiva.
- Algunas recomendaciones para una rutina de mantenimiento básica de un sistema de alarma:
- La batería es esencial para el funcionamiento del sistema de alarma, proporciona energía de respaldo en caso de interrupción del suministro eléctrico (accidental o intencional). Que independientemente de la tecnología de la batería (de eléctrolito absorbido o de gel), con el paso del tiempo "se seca" y pierde capacidad de retener carga.
- Si las baterías de gel se descargan por completo, es decir, se corta la energia de la red y se agota completamente su carga, esto puede afectar negativamente su rendimiento y reducir su vida útil.
- Las baterías de gel están diseñadas para descargarse solo hasta un cierto punto antes de ser recargadas. Si se descargan completamente, se puede dañar el gel electrolítico que se encuentra dentro de la batería. Además, una descarga completa puede provocar la sulfatación de la batería, lo que significa que los cristales de sulfato de plomo pueden formarse en las placas de la batería y dificultar la capacidad de la batería para retener la carga.
- Si una batería de gel se ha descargado completamente, se debe recargar lo antes posible. Es recomendable verificar la condición de la batería y cada 3-5 años reemplazarla.
- También es importante verificar los sensores para asegurar el correcto funcionamiento. Verifico la sensibilidad de los sensores infrarrojos, y si hay mascotas en el lugar, que los sensores se activen a partir de la altura correcta.
- En el caso de un sistema de alarma inalámbrico, con sensores que funcionan a pilas o baterías, reemplazo las pilas o baterías de los sensores que no funcionen.
- Cuando hay algun sensor infrarrojo "rebelde", que se dispara cuando varía la temperatura del ambiente, se reorienta o reemplaza por otro sensor de mejor tecnología.
- Los sensores magnéticos de puerta y ventanas también se revisan, asegúrando de que no estén sueltos u obstruídos y que estén colocados en la posición correcta. Cuando encuentro un sensor o dispositivo del sistema sujeto solo con pegamento, refuerzo la sujección con tarugos y tornillos.
- Cuando el sistema usa barreras perimetrales de rayos infrarrojos, verifico el funcionamiento y limpio la suciedad y telarañas de los componentes de la barrera.
- Y cuando la central tenga instalado sensores de humo, anti-incendios o de inundación, reviso cada sensor y compruebo su funcionamiento.
- Según el grado de protección al que corresponda el sistema de alarma, debe estar conectado a una central receptora de alarmas o a un dispositivo de notificación. Es recomendable verificar periódicamente la conexión del sistema y asegurarse de que funciona correctamente.
- En caso de no estar conectado a un servicio de monitoreo, igualmente verificar el funcionamiento del modem o interface GSM de la central de alarma.
- Es importante realizar pruebas periódicas del sistema de alarma para asegurarse de que funciona correctamente. Por añadidura, esta prueba tiene un efecto disuasorio ante eventuales curiosos. Probar el sistema simulando una intrusión o emergencia y verificar que se active la alarma, suene la campana electrónica y se notifique a las personas adecuadas.
- Si el sistema de alarma utiliza software para la gestión, evaluar la conveniencia de actualizarlo para garantizar la seguridad y estabilidad del sistema. Verificar las actualizaciones del software y aplícarlas según sea necesario.